Pero lo realmente grave es que en playas como Sa Nau (que es un sitio increible) no hay sitio para poner la toalla Ahí está el conflicto: solo puedes ponerte en tumbona o entre las tumbonas, porque el resto es un chinguito,tumbonas,sombrillas de paja, dos carpas para masajes y una carpa más para que el chiringo ponga mesas.
Es tal el abuso que el socorrista tiene que marcar con unos conos su escalera para poder subir. Es decir, se les ha ido la pinza. Si no, no habría problema: la gente que no quiera o no pueda pagar una tumbona disfruta libremente en el espacio sin ellas, y la que quiera tumbona, pues alquila una y aquí paz y después gloria.
En cuanto a la cuestión legal está clara: cualquiera puede ir y alquilar una hamaca, del mismo modo que cualquiera puede poner su toalla entre tumbonas sin que nadie le diga nada. Y menos mal que es así, porque ya solo faltaba que estuviésemos aquí a la italiana, con las playas privatizadas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.